¿A menudo has pensado que tu pareja debería ser un padre/madre, esposo/a, amante perfecto?
¿Te escuchas a menudo pensar que deberías ser siempre eficiente, no equivocarte, no cansarte nunca, no enfermarte?
¿Tus hijos deberían portarse siempre bien, obedecer siempre, al instante?
¿Te genera sentimientos negativos el pensar que deberías tomar siempre la mejor decisión, comprender y prever todo?
¿Te irrita la gente, su conducta, sus opiniones y sus comportamientos, crees que no actúan como deberían actuar?
Si has respondido que si, bingo!! Eres una persona "debería" . Lo bueno de darte cuenta, de reconocer que tienes este tipo de pensamientos distorsionados, es que puedes cambiarlos!!! Te felicito!!
Para mejorar tu relación con estos pensamientos distorsionados, y que no te sientas desilusionado con los demás, ni contigo, me gustaría profundizar en el tema.
Lo que nos duele o molesta, no es la conducta de los demás. Es básicamente, lo que nuestra mente nos dice que "Debería" ser y no es. Tenemos una serie de "normas" que los demás y nosotros mismos debemos cumplir. Si esto no ocurre, sufrimos. Nos sentimos defraudados. Creemos que nuestras reglas son correctas, inflexibles, que son lo más lógico, que pensar o creer que esto no debería ser así no es normal.
Cualquier "norma" diferente, es evaluada como mala, irresponsable, ilógica o fuera de lo normal.
¿En qué lugar nos deja eso, cuando tenemos unas normas demasiado estrictas? Nos posicionamos como jueces, y todos cometen faltas. Cuanto más alejados estén los demás de nuestras normas, más nos irritan. Estamos convencidos que los demás son unos irresponsables, que tienen opiniones o hábitos inaceptables, que sus actos no son correctos y son muy difíciles, cuando no imposibles de tolerar.
Ellos, deberían comportarse como es debido. Deberían conocer las reglas, y seguirlas.
Pero lamentablemente, por mucho que tu asi lo pienses, los demás no van a cambiar. Porque el problema es que las personas, si bien "podrían" ser de determinada manera, en realidad, son como son....
¿Como resolver esta situación?
Es necesario que reexamines y cuestiones cualquier norma personal que tengas, que incluya las palabras "debería", "tendría que", "habría que"... Es mejor reevaluar estas expectativas, y cambiarlas por unas más flexibles, porque siempre hay excepciones y circunstancias especiales.
Que nos irritemos o algo nos haga sentir desilusionados sobre la conducta de los demás, porque no actúan como nosotros esperamos, de acuerdo a nuestros valores personales, es algo que podemos cambiar. Todas las personas son difererntes. No siempre nuestros valores son los que tienen los demás, ni tienen por qué serlo.
La clave está en reconocer que todas las personas son diferentes, con sus necesidades, limitaciones, peculiaridades, todos tenemos miedos diferentes, gustos y placeres distintos.
No podemos controlar lo que harán los demás, pero si podemos controlar nuestras expectativas, nuestras normas y cambiarlas cuando sean demasiado rígidas. Con esto, no te estoy diciendo que tienes que "tolerar" todo lo que los demás hagan. Si hay algo que para ti es imposible aceptar, háblalo, de una manera asertiva, sin juzgar ni criticar al otro, sino expresando tu incomodidad, desde tus sentimientos. Tú tienes derecho a tener una opinión, pero los demás, también la tienen. Acepta que algunas veces, tu norma inflexible puede estar equivocada, o incluso puede estar haciéndote daño a ti mismo o a tus relaciones personales.
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